Material: Conos para marcar los nueve puntos de juego. Objetivo: Formar una línea con tres personas, sea en vertical, horizontal o diagonal. Regla: No se permite formar en la primera fila del lado del equipo. Es decir, el equipo de la izquierda no puede formarse en la primera fila horizontal de la izquierda. Cómo jugar: Separar el equipo en dos grupos. Numerar los dos grupos alternadamente (1,2,3 ... 3,2,1) y llamar a las personas por sus números. Al llamado del líder del juego, las personas con el número indicado corren y se posicionan encima de uno de los conos y así sucesivamente, hasta que un grupo forme una línea.
Pregunta: ¿Qué fue necesario hacer para alcanzar el objetivo del juego? Posibles respuestas: • Trabajar en equipo. • Saber quién eras – tu número. • Estrategia – para tu equipo y para el equipo adversario. • Rapidez. • Atender el llamado.
APLICAIONES PARA LA VIDA:
• No conseguimos vencer solos. Los integrantes del grupo no podían pensar sólo en sí mismos, cada uno dependía del otro para vencer. La línea sólo se completaba con tres personas. Esto nos enseña que juntos somos mejores. Que precisamos los unos de los otros y que no podemos olvidarnos de eso. • Tenemos muchos sueños y precisamos luchar para realizarlos. Para esto precisamos trazar metas y estrategias a lo largo de la vida. Pero también sabemos que hay algunas personas que sólo obstaculizan, hay que poner un ojo en ellas, pero no olvidar lo que realmente debemos hacer. • Vivimos en un mundo muy rápido. No podemos quedarnos parados o dejar que otros nos lleven. No dejemos que la vida nos lleve por cualquier camino, seamos más rápidos y aprovechemos bien todas las oportunidades antes que otro las aproveche por nosotros. • Obedecer a lo que estaba siendo mandado nos enseña que existen personas muy especiales en nuestras vidas que tenemos que escuchar siempre, y atender las cosas que nos orienten a hacer. Nuestros responsables, sean padres, profesores, o abuelos, quieren lo mejor para nosotros, tienen más experiencia y por eso nos pueden orientar con más seguridad. • Al comienzo del juego nos perdimos pensando que nuestro número era el 6, cuando era 5. En la vida pasa lo mismo, pensando ser o saber hacer cosas que realmente no somos o no podemos. Pensemos un poco sobre nuestras cualidades e invirtamos en ellas. Hacemos muy bien las cosas que nos gustan hacer.
APLICACIÓN ESPIRITUAL:
• Somos importantes, especiales, únicos, inteligentes, rápidos, capaces. Precisamos saber quiénes somos, y somos todo eso y mucho más. Cuando alguien nos diga lo contrario, recordemos quiénes somos. Dios nos creó de una manera perfecta, nunca olvidemos esto. • Dios es bueno en todo tiempo, el tiene siempre planes buenos, perfectos y agradables para nuestra vida, pero la biblia dice que el diablo vino para robar, matar y destruir, por lo que debemos estar atentos ya que él quiere obstaculizar sus planes.
Material: Conos para marcar los nueve puntos de juego.
ResponderExcluirObjetivo: Formar una línea con tres personas, sea en vertical, horizontal o diagonal.
Regla: No se permite formar en la primera fila del lado del equipo. Es decir, el equipo de la izquierda no puede formarse en la primera fila horizontal de la izquierda.
Cómo jugar: Separar el equipo en dos grupos. Numerar los dos grupos alternadamente (1,2,3 ... 3,2,1) y llamar a las personas por sus números. Al llamado del líder del juego, las personas con el número indicado corren y se posicionan encima de uno de los conos y así sucesivamente, hasta que un grupo forme una línea.
Pregunta: ¿Qué fue necesario hacer para alcanzar el objetivo del juego?
Posibles respuestas:
• Trabajar en equipo.
• Saber quién eras – tu número.
• Estrategia – para tu equipo y para el equipo adversario.
• Rapidez.
• Atender el llamado.
APLICAIONES PARA LA VIDA:
• No conseguimos vencer solos. Los integrantes del grupo no podían pensar sólo en sí mismos, cada uno dependía del otro para vencer. La línea sólo se completaba con tres personas. Esto nos enseña que juntos somos mejores. Que precisamos los unos de los otros y que no podemos olvidarnos de eso.
• Tenemos muchos sueños y precisamos luchar para realizarlos. Para esto precisamos trazar metas y estrategias a lo largo de la vida. Pero también sabemos que hay algunas personas que sólo obstaculizan, hay que poner un ojo en ellas, pero no olvidar lo que realmente debemos hacer.
• Vivimos en un mundo muy rápido. No podemos quedarnos parados o dejar que otros nos lleven. No dejemos que la vida nos lleve por cualquier camino, seamos más rápidos y aprovechemos bien todas las oportunidades antes que otro las aproveche por nosotros.
• Obedecer a lo que estaba siendo mandado nos enseña que existen personas muy especiales en nuestras vidas que tenemos que escuchar siempre, y atender las cosas que nos orienten a hacer. Nuestros responsables, sean padres, profesores, o abuelos, quieren lo mejor para nosotros, tienen más experiencia y por eso nos pueden orientar con más seguridad.
• Al comienzo del juego nos perdimos pensando que nuestro número era el 6, cuando era 5. En la vida pasa lo mismo, pensando ser o saber hacer cosas que realmente no somos o no podemos. Pensemos un poco sobre nuestras cualidades e invirtamos en ellas. Hacemos muy bien las cosas que nos gustan hacer.
APLICACIÓN ESPIRITUAL:
• Somos importantes, especiales, únicos, inteligentes, rápidos, capaces. Precisamos saber quiénes somos, y somos todo eso y mucho más. Cuando alguien nos diga lo contrario, recordemos quiénes somos. Dios nos creó de una manera perfecta, nunca olvidemos esto.
• Dios es bueno en todo tiempo, el tiene siempre planes buenos, perfectos y agradables para nuestra vida, pero la biblia dice que el diablo vino para robar, matar y destruir, por lo que debemos estar atentos ya que él quiere obstaculizar sus planes.